Mario Iván Martínez

Actor, músico y cuenta - cuentos

Recitales poéticos musicales

Concierto homenaje al Orfeo Británico

El ensamble vocal de música antigua

ARMONICUS CUATRO

presenta su espectáculo de

Opera Barroca
Con el homenaje al Orfeo británico

Henry Purcell
1659 - 1695

Una selección de sus obras

Dido y Aeneas
y
La Reina de las Hadas

 

Lourdes Ambriz, soprano
Nurani Huet, mezzo-soprano
Mario Iván Martínez, tenor
Martín luna, barítono
Karina Peña, teclado Margarita Isabel, narradora

Textos adaptados de la obra de Marguerite Yourcenar,
Frencisco de Quevedo y Sueño de una Noche de Verano de
William Shakespeare

Dirección escénica
Margarita Isabel

 

Opera Barroca

Programa

Dido y Aeneas
(Fragmentos)

Intermedio

La Reina de las Hadas
(The Fairy Queen)
Fragmentos

Música de Henry Purcell
1659-1695

 

Notas al Curioso Lector

Dido y Aeneas es la única obra de Purcell que es completamente cantada. Esta obra fue escrita para una función paticular de un colegio de señoritas y era casi desconocida para el público del siglo XVII. El texto fue escrito por Nahum Tate y la ópera fue estrenada en Chelsea en 1689. Con la excepción del papel de Aeneas, es probable que todos los otros personajes de la obra fuesen interpretados por las alumnas de la escuela. Brujas, marineros y hechiceras conviven con los protagonistas de la tragedia de Cartago.

Al escuchar por primera vez La Reina de las Hadas, podría ser casi imposible percatarse de que alguna vez se basó en la obra de Shakespeare Sueño de una Noche de Verano. La relación de una a otra equivale a la versión fílmica de un musical del siglo XX como Amor sin Barreras, con Romeo y Julieta. Ni una parte del texto de Shakespeare fue musicalizado por Purcell. El compositor se basó más bien en textos anónimos paralelos a la trama donde aparecen toda suerte de personajes alegóricos como las estaciones del año, además de pastores y ninfas.

En la propuesta de ópera de cámara que hoy presentamos hemos querido intercalar fragmentos de la obra original del bardo inglés, textos de Marguerite Yourcenar y Francisco de Quevedo con el propósito de asegurar el claro entendimiento de la trama, ya que toda la obra es interpretada en su idioma original en inglés pues Purcell orgullosamente concibió su música en estricto apego a la cadencia y a la musicalidad inherente de su lengua.

Se concibe nuestro esquema escénico como un gozoso divertimento cortesano donde los cantantes ataviados lujosamente a la manera del siglo XVII, echan mano de vistosas máscaras y diversos elementos de utilería para caracterizar a toda una miscelánea de personajes que van desde la reina de Cartago y un par de brujas juguetonas, hasta toda suerte de hadas y espíritus del bosque; desde el pícaro duende Puck, hasta un cómico asno embriagado.

Así, la música se fusiona con la poesía y con el cuento y a su vez Henry Purcell nos entrega generoso el espíritu musical de su época a través de su inagotable talento e inspiración, lo cual le valió el ser por siempre recordado como el Orfeo Británico y a su vez pionero de la ópera moderna.

Nuestra preferencia por la ópera italiana decimonónica ha llevado al olvido muchas de las óperas de autores como Monteverdi, Purcell o Handel y en general de los autores del barroco temprano. Hoy nos complace que en México existan espacios para la difusión de esta música que no debe ser sólo para historiadores, sino parte de nuestra herencia más viva y más rica.

Enrique Purcell (1659 - 1695)

Nació en Londres en el seno de una familia excepcionalmente musical. Tanto su padre como su tío eran caballeros de la Capilla Real y miembros de la orquesta personal del rey. Por 150 años la familia Purcell vivió de la música. De todos ellos, Henry fue el más notable y es correctamente considerado uno de los compositores más relevantes de su tiempo.

Estableció una sincera y sólida amistad con la reina María II de Inglaterra y la música que escribió para ella tiene el poder de albergar sin sonrojo su enorme fidelidad y gratitud hacia la monarca.

Murió prematuramente y en sus últimos años escribió una gran cantidad de obras, todas ellas poco menos que deslumbrantes y en perfecta armonía con la cadencia y musicalidad inherente al idioma inglés.

Entre los trabajos más relevantes destacan: La Reina India, El Rey Arturo, La Tempestad y por supuesto Dido y Aeneas y La Reina de las Hadas. Junto con Monteverdi, Purcell es considerado como un importante pionero del género operístico.

Sus restos descansan no muy lejos de su entrañable amiga, la reina María II, debajo del órgano que tocó por más de quince años en la majestuosa abadía de Westminster en la ciudad de Londres.

Diseño de vestuario y adaptación de textos: Mario Iván Martínez
Máscaras: Gabriela Villalpando
Asistentes de producción: Carlos Ortiz, José Luis Vargas,
Un rato para Imaginar ® Producciones - Rosamaría Morales Representante
mogr1919@prodigy.net.mx / www.marioivanmartinez.com

Armonicus Cuatro

Nace con el afán de impulsar un trabajo grupal creativo a través de la exploración gozosa de la polifonía vocal del mundo. La diversidad de su repertorio inevitablemente encuentra un estimulante punto de partida en la obra de los grandes exponentes de la polifonía medieval y renacentista como Francesco Landini, c.1325-1397, Gillaume Dufay c.1400-1474, Clemént Jannequin, 1475-1560 y Orlando di Lasso 1532-1594. Asimismo incluye el trabajo de autores decimonónicos y contemporáneos cuyas propuestas musicales integran de forma aventurada y fascinante las influencias de los maestros del pasado. También ofrecen repertorio donde viajamos desde la Italia del Medioevo, hasta el esplendor de la Nueva España; de la Inglaterra isabelina y el Siglo de Oro Español, hasta los más aventurados compositores de la modernidad. Su programa de Opera Barroca presenta una elocuente selección de las óperas Dido y Aeneas y la Reina de las Hadas del extraordinario compositor inglés Henry Purcell, 1659-1695.

Formado por artistas ampliamente reconocidos, Armonicus Cuatro conjuga primordialmente el sentido lúdico con el júbilo que proporciona la aventura de explorar la obra de los máximos exponentes de la polifonía universal.